martes, 17 de mayo de 2016

Mujer

A ti, mujer, que le llamas "zorra" y "puta" a otra porque ejerce libertades que tú reprimes o porque tu novio no te respetó y preferiste echarle la culpa a ella, a ti te mando un enorme abrazo, porque no hay nada más triste que una mujer misógina y machista. Te quiero y te lo digo porque te hace falta escucharlo y te respeto porque te hace falta sentirlo.


Grito

No me voy a callar. No me lo pidas, no me lo ordenes, no me lo sugieras ni me lo supliques. Voy a hablar, a cantar y a gritar todo lo que quiera porque nací, sin más, sin importar que al crecer se vuelva vana la palabra y el deseo, seguiré sin piedad expresando lo que siento porque sé que es lo correcto. Porque de los gatos aprendí a poner un alto y a quejarme en cuanto me hacen algo que no quiero, a arañar si no se detienen. De los bebés aprendí que el único lenguaje universal ante el dolor, el hambre y el frío son los gritos. Porque de las injusticias entendí que las revoluciones empezaron cuando se atrevieron a expresar su desacuerdo y decidieron enterrar la resignación. Porque la sumisión se manifiesta quedándose callado y yo nací guerrera, violenta, fuerte, con ideas, puños y voz, nací para ejercerme. No me llames egoísta porque no voy a hablar solo por mí, también por ti, aunque me calles, porque a ti ya te han callado y porque te tragaste la conformidad de una vida y aceptaste que te moldearan, que te quiten tu naturaleza rebelde para meterte en un cubículo deformando tu alma y volviéndola un saco de tolerancia, fingiendo paz disfrazando negación y debilidad. Te voy a defender, porque de los perros aprendí la lealtad, protección y agradecimiento con los tuyos a pesar de que te fallen. Voy a hablar porque amo mi voz y voy a escribir porque son las únicas maneras que conozco para ser y hacerme ver.