miércoles, 3 de febrero de 2010

Luna de Loba

Sentada en la ventana de una habitación cuya única fuente de luz es la luna llena que yace colgando en un cielo infinitamente profundo. El frío cala sus delicados pies descalzos. El viento congelado se cuela entre sus rodillas, elevando ligermante el camisón indigo que usa, por cierto, combina magnífico con su pálido rostro, parece víctima de rigor mortis. Sus labios tiemblan, sus rizos pelirrojos se mueven, la piel se le eriza.
En otro lugar sabe que te encuentras, probablemente dormido, a menos que sufras mal de insomnio también. ¿Estarás de pie frente a tu ventana viendo la misma luna llena? ¿Estará tu respiación provocando bao? ¿Acaso está tu nuevo amor recargada en tu espalda? ¿Llenará el hueco que dejó en tu cama? Comienza una suave lluvia, finamente tupida. La salpica. Es momento de encender un cigarillo, aunque con el clima, la llama no se presta fácilmente. Aspira. Muerde la uña de su pulgar, piensa. Te recuerda con recelo. El humo le es delicioso, es delirante sentir el desgarre que causa en su garganta.
Extraña tus lunares aunque poco a poco ha ido olvidando sus coordenadas en tu piel. Extraña tu olor y tu voz que ya escasean en su memoria. Besar tu frente, quisiera, morder tu nuca. Tenerte en este cuarto, en esta noche helada y prender una fogata debajo de las sábanas.
Ojalá que estés duermiendo plácidamente y sea tu nueva amante quien le tema, que sepa y sea conciente de que te quitó y te dio lo que ya nadie más puede. Tu mujer, en algún momento, notará que sus besos te saben mal, y al abrir los ojos, sentirás la decepción de no ver a la pelirroja, de no tener sus piernas, al igual que no sentir las caricias, ni escuchar los mormullos y carcajadas indecentes al oído.
Podría pasar toda la noche como loba, fiel a la luna y a ti.
Afortunadamente no diario es luna llena, además alguien se levanta en medio de la habitación, le pone fin a tu recuerdo y sin quejas, ni dudas, la abraza. Ella apaga el cigarro, es cargada como un princesa y acomodada en la cama. Él la besa, la besa, la besa y más... La ama.
Luna se queda ahí, sencillamente como testigo de dos parejas entre las que ya nada tiene sentido.

1 comentario:

  1. No sé si alguien haya leído esta entrada y se haya quedado con cara de WTF?
    Un amigo me dijo que no lo había entendido...
    pues un leve explicación.
    Luna llena hay solo una vez al mes, así es la referencia de una mujer que solo recuerda a su ex amor una vez al mes; como si se transformara en lobo que aulla a la luna. Ella sufre pero por suerte hay alguien que la saca de ese trance y hace que todo vuelva a la normalidad. Como si fuera antídoto.

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